SEMBRAR URGENCIAS, COSECHAR NOVEDADES. LA (IR) RESPONSABILIDAD DE LOS MEDIOS DE COMUNICACIÓN

Silvia Natalia Ferro Sardi
Instituto Interdisciplinario de Estudios Latinoamericanos (IIELA), Facultad de Filosofía y Letras – UNT
nferrosardi@yahoo.com.ar - nataliaferro@universia.com.ar

Resumen:

La erradicación de la pobreza ha constituido uno de los compromisos claves asumidos por decenas de países miembros de Naciones Unidas durante La Cumbre del Milenio, llevada a cabo en el año 2000 (Aguirre, 2008a). En Argentina, el final de la década de los ’90 supuso una contracción económica. El año 1998 marca el inicio de una de las recesiones más fuertes y perdurables del país. Algunas de las consecuencias que trajo fueron la inestabilidad laboral, el incremento del desempleo, el aumento de los índices de pobreza o empobrecimiento y criminalidad (Gutiérrez, 2004). La situación fue cobrando cada vez mayor gravedad hasta alcanzar un punto de inflexión con la renuncia del presidente en diciembre del 2001 y los sucesivos cambios de mandatarios (Fiszbein et alt., 2002), el violento – por las represiones en protestas, los saqueos y las muertes de civiles - estallido social, la inflación y el no aumento de los sueldos, las presiones externas del FMI y una serie de violaciones a los derechos del individuo. Nuestro análisis se circunscribe al estudio de la configuración mediática de una sucesión de acontecimientos – cuyo hilo conductor puede inscribirse, a falta de definiciones mejores, bajo los sintagmas de “pobreza” y “desnutrición infantil” – a partir de un recorte temporal que implicó revisar los textos de un solo diario – La Gaceta, de Tucumán – publicados durante un periodo de casi un año (entre el sábado 11 de mayo de 2002 y el martes 22 de abril de 2003). Es nuestra intención recorrer este corpus y leerlo a contrapelo desde una perspectiva de género. Esa propuesta es una elección ideológica e implica considerar los intersticios no sólo entre lo dicho y lo comunicado, sino también entre lo considerado y lo omitido.